Era crónica de una muerte anunciada.
Este martes se terminó la triste agonía de Chile en las Clasificatorias. Perdió (2-0) ante Bolivia y ya ni las matemáticas sirven de esperanza. La "Roja" quedó fuera del tercer Mundial consecutivo.
Si bien los números aún daban una luz de ilusión, hace rato parecía sentenciado el camino del equipo dirigido por Ricardo Gareca, que con esto cerró su proceso al mando del elenco nacional.
Ya ayer Pablo Milad anunciaba que tras este partido se tomarían decisiones. E
l contrato del "Tigre" dice que una vez que esté fuera de la opción de clasificar a la cita planetaria puede ser desafectado sin indemnización. Y esto ocurrió.
Lo de Chile en El Alto no fue más que estirar un elástico que hace rato no daba para alargarlo más. Incluso jugó gran parte del duelo con un jugador más. A los 17' fue expulsado Lucas Chávez en el local.
A esa altura los altiplánicos ya ganaban con tanto de Miguel Terceros a los 4'. Pero ni el jugar con uno más ayudó a la "Roja". Más allá de uno que otro intento con balones largos, no tuvo chances.
Alexis pedía que se la dieran al pie. Gareca suplicaba por lo mismo, pero era difícil. La altura le complicó a los chilenos.
A los 9' del segundo tiempo todo empezó a cerrarse. Francisco Sierralta se fue expulsado y en igualdad de condiciones fue más empinado el partido. Bolivia aprovechó e incluso Enzo Monteiro anotó el segundo gol a los 90'.
La "Roja" ya no puede alcanzar siquiera el repechaje. Está a ocho puntos, con seis por jugarse. Colista absoluto de las Clasificatorias es un desastre por donde se mire.
Solo quedan dos partidos -ante Brasil y Uruguay- y será por cumplir. Lo que viene está en manos de la ANFP. Sin Gareca habrá que salir a buscar DT, solo para esas últimas jornadas o un técnico definitivo hasta el próximo proceso.
El fútbol chileno está hundido.
