Un rechazo transversal generó entre organizaciones ambientalistas la resolución del
Tribunal Constitucional (TC) que propinó ayer una dura derrota al Gobierno al rechazar su solicitud para invalidar una decisión del Primer Tribunal Ambiental (1TA) en torno al proyecto minero portuario Dominga, que busca instalarse en La Higuera, Región de Coquimbo.
Esto, luego que el TC revisara la "contienda de competencia", mecanismo jurídico que se utiliza cuando dos órganos del Estado -en este caso, un órgano istrativo (el Comité de Ministros) y uno jurisdiccional (el 1TA)- se adjudican competencias sobre un mismo asunto, o incluso cuando uno de ellos estima que el otro ha sobrepasado su esfera de atribuciones.
Recordar que a inicios de 2023, el Comité de Ministros rechazó el proyecto, sin embargo, la empresa Andes Iron recurrió al 1TA, el que en 2024 anuló el rechazo del comité, por considerar que la resolución era "ilegal", debido a que previamente los integrantes de la instancia se habían expresado en contra de la iniciativa, y no se inhabilitaron. En su resolución, el 1TA ordenó que se volviera a votar el proyecto, y esta vez, lo hicieron subrogantes, que también rechazaron el proyecto.
Pero el 1TA ordenó volver a votar, tras determinar que la decisión de los subrogantes incumplió con la sentencia del mismo tribunal, que había declarado "ilegal" la resolución de 2023. Así, el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), en representación del comité de subrogantes, recurrió al TC para que aclarara las competencias tanto del propio comité como del 1TA, pues a juicio del Gobierno, el 1TA no podía alterar una resolución del comité de ministros.
Pero ayer, el TC le dio la razón al 1TA, y concluyó que este tribunal sí es competente para ordenar al SEA modificar una decisión del Comité de Ministros. En la práctica, esto significa que Dominga aún tiene opciones para que el proyecto sea aprobado.
Este escenario ha concitado un fuerte rechazo de organizaciones ambientalistas, desde donde acusan que "la justicia está hecha a medida de la industria", y que continuarán trabajando para impedir la instalación de Dominga en la zona, junto con advertir que "vamos a continuar hasta las últimas consecuencias".
"La justicia ambiental está hecha a la medida de la industria" 633m2x
Desde el Movimiento en Defensa del Medio Ambiente de La Higuera (Modema), su presidenta, Carolina Bahamondes, afirmó que "no haremos oídos sordos a la corrupción ni a la desidia, aquí hay suficiente ciencia para respaldar el rechazo definitivo de este proyecto, no vamos a permitir que Dominga se instale en nuestra comuna, vamos a continuar hasta las últimas consecuencias levantando la voz ante la injusticia".
Por su parte, Rodrigo Flores, pescador artesanal y presidente del Consejo Consultivo de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt, comentó que "el proyecto Dominga destruyó el tejido social de La Higuera al dividir a la comunidad; pretende destruir uno de los ecosistemas más ricos y únicos del mundo, junto a los empleos que actualmente se desarrollan en el lugar; y ahora, ha destruido la institucionalidad ambiental del país".
Otro de los puntos fuertemente criticados por los entendidos en la materia es cómo el caso judicial de Dominga ha ignorado a la ciencia, y afirman que las sentencias se han escudado en tecnicismos istrativos, sin abordar jamás la arista ambiental. Para Liesbeth van der Meer, directora ejecutiva de Oceana en Chile, esto se explica porque "la justicia ambiental está hecha a la medida de la industria, sin considerar el conocimiento científico de la zona, la protección del medio ambiente y la voz de las comunidades locales".
La directora de la organización de conservación marina subrayó además que "con el archipiélago Humboldt no permitiremos que se repita la historia de proyectos como Celco o Pascua Lama, donde la ciencia fue ignorada y se generaron daños irreparables e irreversibles en el medio ambiente".
"La justicia a la medida de la industria" 6m3y5n
En tanto, desde la Alianza de Humboldt señalaron que, a la luz del reciente fallo del Tribunal Constitucional, "podemos concluir que la justicia está hecha a la medida de la industria, a la ciencia nadie la escucha, el daño al medio ambiente no importa, y se ignora la lucha histórica de las comunidades del Archipiélago de Humboldt".
"El proyecto minero portuario Dominga fue rechazado en tres oportunidades, y Andes Iron, no conforme con ello, judicializó los rechazos en todas las instancias. Es esta compañía la que insiste en construir en un lugar donde la prioridad es proteger el medio ambiente y los trabajos sustentables que allí se desarrollan", subrayaron.
Respecto al fallo del TC, expresaron que "no solo nos decepciona porque sigue dejando abierta esta disputa entre la protección de un ecosistema único en el mundo y el rédito de unos pocos años que puede generar una mina de hierro, sino que también deja en la total futilidad la existencia de nuestra institucionalidad ambiental. Es un golpe a la justicia y al clamor de la ciudadanía, sin embargo, desde Alianza Humboldt tenemos certeza de que este proyecto no está aprobado, y seguiremos trabajando y utilizando las instancias necesarias para así demostrarlo".
Con todo, afirman que "la justicia ambiental de nuestro país ha fracasado. Aparentemente, el progreso sólo tiene espacio para avalar proyectos que, pese a sus impactos nocivos, pueden llevarse adelante con el poder del dinero. No olvidemos que este proyecto, además, está precedido por un historial de corrupción sin precedentes en nuestro país, siendo Dominga parte central del caso Penta, de los Pandora Papers y del caso Audios. Siguiendo el camino de la presión inescrupulosa, esta minera y su mega puerto ponen en riesgo la institucionalidad de Chile, y un sistema de vida de los que van quedando en nuestro territorio".
"El mundo científico ha reiterado en todo momento: cualquier intervención en el Archipiélago Humboldt generaría un daño irreversible en este laboratorio natural. Hay evidencia que lleva a expertas y expertos a manifestar su férrea negativa a que se levante una mina y un mega puerto en este lugar, reconocido mundialmente por ser un hotspot de biodiversidad", subrayaron.
Asimismo, expresan que "hoy Andes Iron pone en riesgo al Archipiélago Humboldt, a la justicia ambiental, a las comunidades locales, a las especies amenazadas, a la institucionalidad y el futuro de un país que alguna vez se levantó en masa para decir 'No a Dominga'. Pese a este escenario, las organizaciones de la Alianza Humboldt reafirmamos nuestro compromiso con la defensa del archipiélago, sus comunidades y uno de los ecosistemas más importantes a nivel global, y seguiremos adelante con las acciones que sean necesarias para así preservarlo".